Redacción.- Era un partido para jugar unidos y lo hicieron. El resultado no pasó por la falta de compromiso, ni de respaldo con el DT. Los jugadores del Atlético Morelia dejaron hasta la última sudor en el Carlos Iturralde. Se mostraron comprometidos, lucharon, e incluso fueron mejores que su rival, pero perdieron. La clasificación directa se complica y la continuidad de Carlos Morales está cada vez más complicada.
Gol de vestidor. Los cambios rindieron efecto de inmediato. Alonso Flores y Damián Torres a la titularidad. El primero le pegó de tiro libre. El portero Alcaráz escupió la bola y Torres la clavó. No habían pasado ni dos minutos y el Morelia ya lo ganaba. Todos fueron a festejar al área técnica con Carlos Morales.
Cayó el gol y Venados o despertaba. Morelia empujaba, pero sin mucha claridad en busca del segundo gol. Era intenso y jugaba en el campo rival. Esa fue la tónica de un primer tiempo en el que solo hubo otra de peligro para el ‘Canario’, un disparo de Damián Torres que se fue cerca del poste al 24′.
No obstante, hubo malas noticias para los rojiamarillos. Una lesión más. El mal de todo el torneo. Ulises Cardona se tuvo que ir al minuto 20, Dennys Navarrete ingresó en su lugar.
Y el mismo Dennys Navarrete fue el hombre que dejó pasar a Carlos Rosel, encargado de anotar un gol de otro partido. tras recortar al centro y dejar atrás a canterano, entró al área por el vértice izquierdo en relación a Sebastián Sosa, quien solo siguió con la mirada un chanflazo infernal de Rosel que se clavó en el ángulo para convertir el empate de los locales al 35′.
Antes del primer tiempo, Mérida lo pudo dar vuelta pero un disparo de Rodríguez, tras jugada de Lora, se fue desviado de la portería de Sosa.
Para el segundo tiempo, Morelia inclinó la cancha durante los primeros 20 minutos. Llegó con peligro en tres ocasiones. Alcaráz le sacó una del ángulo a Enrique Cedillo. Pero a partir del minuto 765 bajó la intensidad de los rojiamarillos, Venados comenzó a atacar y encontró recompensa.
Uno de los goleadores del torneo, Mauro Pérez, aguantó la carga en tres cuartos de cancha, se perfiló y mandó a guardar un derechazo que dio un bote antes de entrar a la red. Sosa estuvo lejos de atacarlo y Venados se apoderaba de la voltereta.
Al final, ingresaron Uchuari y Pedroza pero era demasiado tarde. Le volvieron a dar la vuelta al Morelia, como ocurrió en Hermosillo y ahora la clasificación directa está difícil, mientras Carlos Morales espera la resolución oficial sobre su continuidad.