Redacción.- El Atlético Morelia es semifinalista. Nadie le puede quitar la cima del torneo. Le ganaron 2 – 3 a Dorados en un partido con tres golazos, cortesía de Acosta y los dos Pérez. Cuarto triunfo en fila para los de Valiño, que hoy son más candidatos que nadie para levantar el título.
Goles. Triunfos. Alegrías. 32 puntos. Ya nadie lo alcanza. El mejor equipo de la Liga Expansión es el Atlético Morelia, que ahora lo tendrá que ratificar con la Vuelta Olímpica.
En el Estadio Banorte los rojiamarillos fueron exigidos, pero respondieron con garra y futbol. Y tres señores goles.
El primero fue de Gael Acosta. Temprano en el partido. Era el minuto 17 cuando acarició el balón con la pierna zurda en un tiro libre ligeramente cargado en las afueras del área. La pelota tomó una comba hermosa y aunque no entró tan esquinada, era realmente complicada atajar ese poema de gol.
Dorados reaccionó de inmediato y lo empató un minuto después, en una gran jugada de Domínguez por izquierda, donde llegó a línea de fondo y metió diagonal retrasada que Lucas Da Silva mandó a guardar al segundo poste.
Al descanso se fueron con un empate y con sensaciones de que habría más goles y así fue. Dorados tomó ventaja de pronto con un cabezazo cerca del ángulo bien clavado por Víctor Torres, imposible de tapar para Arana.
La desventaja le picó el orgullo al Morelia, que en todo momento tuvo la iniciativa de asegurar el pase a semifinales. Diego Jiménez no estuvo a la altura de tras ocasiones, hoy el peso ofensivo lo cargó un poco más Gael Acosta, quien estuvo muy participativo en todo el encuentro.
El empate fue otra obra de arte. Una excelsa definición de Eduardo Pérez, quien de primera, le metió el empeine para colocarla a segundo poste del portero Díaz, quien hacía su recorrido para achicar.
Los últimos veinte minutos fueron más de corazón, que de futbol y también en eso fue superior el Morelia, que encontró el gol de las semifinales en el botín de Luis Ernesto Pérez, quien tomó la pelota en las afueras del área y no se lo pensó dos veces para acomodarla en el segundo poste, a un minuto del final.
Dramático, pero con tremendo valor. Morelia firma un mejor torneo que el anterior, donde tuvo que sortear repechaje y cuartos de final. Ahora tendrá que sortear con la falta de competencia dos semanas, pero ya en la antesala de la Gran Final, a un solo paso de pelear por el único objetivo que vale: el Campeonato.
