Redacción.- El arquero argentino tuvo por lo menos tres intervenciones de peso frente al cuadro michoacano.
Nuevamente el ahora guardameta de Cancún fue el némesis del conjunto michoacano, remembrando las dos majestuosas actuaciones que tuvo los dos certámenes pasados con la casaca de Celaya.
Fueron cinco las intervenciones verdaderamente de peso en el trámite del encuentro por parte de Campestrini, una en el primer tiempo y cuatro en la segunda mitad.
La primera de ellas llegó ante un disparo potente de Sergio Vergara al primer minuto del partido, que con una buena colocación le bastó para rechazar el remate del chileno.
Para el segundo tiempo empezó el show del oriundo de San Nicolás de los Arroyos, atajando un disparo a media altura de Diego Abella en un mano a mano, otro remate de Gael Acosta en las mismas circunstancias donde terminó evitando la caída de su marco de nueva cuenta.
Las últimas dos atajadas provinieron de los botines de Martín Barragán, la primera de ellas en un lance espectacular tras un disparo fuera del área con destino único al ángulo superior izquierdo, mientras que la segunda intervención llegó en la agonía del partido en un disparo de Martín Barragán en el área chica.
(Por: Humberto Torres / @HumbertoTorresV).
