Redacción.- Cabizbajo tras la derrota del domingo en Torreón, a Monarcas se le presenta la posibilidad de revancha pronto, ante un Querétaro que aún no termina por identificarse como equipo en el Clausura 2018.
Vuelta a la página. Adiós a la falta de desequilibrio y el bochorno de Sandoval. Hola a la reivindicación.
Morelia buscará reencontrarse con el triunfo ante los Gallos Blancos del ‘Flaco’ Tena, pero antes deberá reencontrarse con el futbol, con la vocación ofensiva. Porque para anotar hay que generar llegadas y en ese tenor quedaron varias dudas registradas.
Enfrente habrá un rival que recién empieza a encontrar su personalidad futbolística. Un equipo con mucha experiencia, tanto en el cuerpo técnico, como en la cancha.
Morelia lo tendrá complicado para hacer gol. Además de un imponente Tiago Volpi en el marco, tendrán que ingeniárselas para superar a una línea defensiva en la que lo sobra es jerarquía con Diego Novaretti, Miguel ‘Negro’ Martínez, Miguel Samudio e Hiram Mier. Esta zaga mantuvo a la poderosa delantera de Tigres seca la jornada anterior. No le permitieron gol a Gignac y compañía.
Mucho del éxito para Monarcas dependerá de la capacidad de sus volantes para ganar la zona del medio campo. Ahí Morelia tiene chance, pues el rombo por el que Tena ha apostado, integrado por Jaime Gómez, Javier Güemez, Luis Noriega y Armando Zamorano, aún no termina por cuajar.
En esa zona queda la incógnita de saber si Roberto Hernández se decantará por integrar desde el inicio a Rodrigo Millar, en detrimento de Aldo Rocha o Mario Osuna.
No estaba en el presupuesto perder contra Santos, como no lo está volverlo a hacer contra Querétaro. Ni siquiera empatar.
Monarcas lo sabe, pero sabe también que será fuerte la resistencia queretana, que entre Sanvezzo, Benítez, Britos y Candelo, tienen con qué prender fuego en Morelia.