Redacción.- En la temporada 1990 – 1991, el Club América, fiel a su costumbre, fue por lo mejor de los equipos chicos y contrató al ‘Fantasma’ Figueroa, que la rompía con el Atlético Morelia.
Mucho se esperaba de Figueroa en Coapa, pero estuvo apenas seis meses y casi no tuvo participación, aunque en lo poco que jugó, dejó huella de su instinto goleador, porque en 7 partidos, hizo 5 goles.
Mucha gente piensa que le pesó la camiseta o que fracasó el goleador chileno con América, pero la realidad es la siguiente. Figueroa fue víctima de un entrenador yugoslavo, Dragoslav Sekularac, quien no quería a los chilenos, porque Chile eliminó a Yugoslavia en el Mundial de 1962 y él jugaba en esa selección yugoslava.
Parece falso, pero es real.
Así lo cuenta el propio ‘Fantasma’, quien declaró que de entrada, “yo no quería ir al América”, pero era un gran negocio para Don Nicandro Ortiz (QEPD).
“Nicandro me dijo, si yo te compré en un peso, y me ofrecen 10 pesos por ti, sería un tonto si no te vendo”.
“Mucha gente cree que yo fracasé en América pero no lo veo así. Yo lo veo como que no supieron aprovechar al goleador del momento, porque en los partidos que jugué, anoté. Lo poco que jugué, rendí bien. Yo venía pasando un muy buen momento (con Morelia) pero no había un técnico idóneo. Yo necesitaba confianza para andar bien, me ponía a jugar de delantero por afuera cuando yo era un ‘9’. Lo mío fue mala suerte, jugué en América con el técnico que no era el indicado”.
“Un día me llamó (el DT) a la oficina y me dijo: ‘Ustedes nos robaron’. Yo no sabía de qué me hablaba. Después supe que él jugó el Mundial de 1962 con Yugoslavia y Chile fue tercero ganándole a Yugoslavia y a mi me culpaba de eso. Le dije que en ese año yo estaba naciendo, que estaba en la panza de mi mamá en ese año”.