Redacción.- Un contragolpe letal definido de forma excelsa por Carlos Guzmán, bastó para que Monarcas saliera con el triunfo por la mínima diferencia sobre el Atlas, en partido celebrado en el estadio Jalisco. El equipo rojiamarillo tuvo un mediano funcionamiento, pero logró imponerse y duerme como cuarto lugar de la general.
Seis puntos de la gira por Guadalajara. Luego de ganar de forma agónica el sábado pasado a Chivas, hoy Monarcas se fajó en defensa para sostener un gol tempranero que al final redituó en tres puntos.
El cronómetro aún no marcaba dos minutos cuando Carlos Guzmán, por mucho el mejor hombre de los michoacanos, la colgó por debajo del travesaño para batir a Óscar Ustari, en una jugada muy veloz que comenzó con un robo de pelota en medio campo de Mario Osuna, quien sirvió al área para Raúl Ruidíaz, quien en lugar de fusilar, tocó de forma muy inteligente a Guzmán, quien ante el marco abierto le pegó con potencia para marcar el único gol del partido.
Tras la anotación, Monarcas presionó en campo rival durante algunos minutos, pero conforme avanzó el encuentro, Atlas se convirtió en dueño de la pelota, al grado de provocar que la estrategia de los michocanos se basara en el contragolpe.
No hubo muchas más ocasiones de peligro en las dos porterías. Fiel a su costumbre, Sebastián Sosa, tapó un par de remates a quemarropa y del lado de Monarcas, Raúl Ruidíaz tuvo la posibilidad de ampliar el marcador en el complemento, sin embargo, no ocurrió.
Al final, Morelia se quedó con el botín completo y demostró que más allá de que Atlas esté urgido de puntos y sea del mismo dueño, hubo una lucha leal en el campo.
Son tres puntos para catapultarse al cuarto lugar y dar un paso importante hacia la liguilla. Quedan aún 12 puntos en disputa y el viernes se recibe a León, mientras tanto, en la familia Azteca, el hermano mayor manda.
